martes, 11 de febrero de 2014

En el ya famoso mundo post-apocalíptico:

Seguiremos necesitando a ese héroe interior
para rescatarnos de nuestra autodestrucción.
El exterminio siempre ha sonado como la mejor opción,
ya que parece muy utópico que logremos siempre lo mejor.

En este mundo enfermo, el virus permanece en nuestras mentes.

Miedo. Inexplicable pero irrefutable pues siempre tiene algo de cierto.
Necedad de sobrevivir.

En el mundo post-apocalíptico la guerra empezó hace mucho y no tiene fecha final,
el enemigo es invisible, su camuflaje es la idea de propiedad.
Tener y pertenecer.

 La apocalispis es nuestra constante, ya que es la esperanza de algún día poder volver a comenzar.

Todos henos aquí, en la ya famoso mundo post-apocalíptico.